Hace ya demasiado tiempo que Johnny Depp perdió su trono en el cine. Los escabrosos escándalos de su tóxico matrimonio con Amber Heard le pasaron una factura profesional que ahora, tres años después de su último papel como protagonista, busca la redención en el festival de cine más importante del mundo. A pocas horas de su estreno en Francia, la película elegida para inaugurar la 76º edición del Festival de Cannes, el drama histórico Jeanne du Barry, se enreda con activistas del Me Too mientras sienta en el trono de Versalles a un Depp sin carisma y acartonado, víctima de una máscara que ha pasado del desmadrado histrionismo de Piratas del Caribe al hierático y evasivo gesto de un actor perdido en sus circunstancias.
La falta de química entre el actor y Maïwenn, protagonista y directora de ‘Jeanne du Barry’, lastra una historia que reivindica a la amante de Luis XV como símbolo feminista. Algunas activistas llaman al boicot del festival por “aplaudir a violadores”Leer más