En la llamada Vega Baja de Toledo, a mediados del siglo VI el rey visigodo Teudis erigió la nueva capital del reino, que llegó a ser la ciudad más importante de Europa tras Constantinopla. Se trataba de un conjunto palatino que incluía, al menos, tres basílicas donde se coronaba a los monarcas, además de un gran palacio. La conocida como Urbs regia, a orillas del Tajo y a los pies del milenario Toletum, estaba cruzada por amplias calzadas y salpicada por antiguos edificios romanos, como un circo y diversos templos. Pero la invasión árabe acabó con estas construcciones y todo terminó cubierto por toneladas de tierra. ¿Se conserva algo de aquellas impresionantes edificaciones? El informe Análisis de las anomalías detectadas por las prospección por georradar multicanal de las parcelas anexas al BIC Vega Baja, elaborado por el Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Fundación Impulsaclm, desvela la existencia aún de numerosos edificios ―uno de ellos con 30 estancias―, otros dos romanos ―posiblemente un palacio―, canales y calles de hasta ocho metros de anchura. No obstante, los expertos (Tania Obregón Penis, Juan Ángel Ruiz Sabina, Gianluca Catanzariti y Antonio José Gómez Laguna) no se aventuran a dar una cronología exacta del conjunto hasta que no se lleven a cabo prospecciones arqueológicas a pie de terreno. Sin embargo, las escasas investigaciones que se realizaron en décadas anteriores señalaban su innegable origen romano, godo e islámico.
Los arqueólogos realizan la mayor prospección no invasiva de España sobre 80.000 metros cuadrados a orillas del Tajo y donde en el siglo VI los godos construyeron Urbs regia, un gigantesco complejo palatinoLeer más