Guillermo solía comprar tarjetas gráficas. Van desde hace tiempo muy buscadas porque tienen muchos usos. Se le ocurrió mirar en Wallapop, una plataforma de compraventa con mucho material de segunda mano. Había una de Nvidia, en un anuncio destacado, a 1.700 euros. “Yo la conozco y ese era el precio mínimo”, dice Guillermo. “Si hubiera costado 500 ya sé que no es real. Regateé al vendedor y me decía que no, que el mínimo es ese, el tío también conocía el producto”, explica.
Un delincuente especializado en fines de semana suplantó la identidad de una tienda en la plataforma y la víctima compró un producto que no existía por 1.650 euros. El defraudador repite su estrategia a menudoLeer más